El postre: innecesario.

A lo largo de los años hemos aprendido que el postre va siempre después de la comida, y tiene que ser algo dulce casi siempre. Es decir, una comida no acaba hasta que no hay postre. Pero esto no es más que un hábito social que nos hemos sacado de la manga.

El hecho de no tomar un postre al final de una comida no tiene ninguna repercusión metabolica, la comida se va a asimilar de la misma manera. Por lo tanto lo recomendable es deshacerse de este hábito social en la medida de lo posible, intentando guardar ese postre, preferiblemente fruta fresca o algún lácteo, para más tarde.

La concepción social de que una comida no se termina hasta que no se toma un postre no es mas que algo que hemos aprendido con el paso del tiempo, lo que se llama "efecto postre", pero esto no tiene ninguna asociación con una mejor digestión ni nada por el estilo. Es simplemente un hábito que podemos eliminar o cambiar.